miércoles, febrero 08, 2017

Lo bello y lo triste. Yasunari Kawabata



Lo bello y lo triste.
Yasunari Kawabata 



Antes de llegar a los treinta años, Otoko comenzó a usar siempre quimono, de modo que su esbeltez ya no resultaba tan evidente como cuando usaba faldas o pantalones.

Con todo, era innegable que adelgazaba mucho todos los veranos. Ahora, aquel fenómeno la hacía pensar en su madre muerta.

Verano a verano, la debilidad y la pérdida de peso de Otoko se iban  haciendo más notables.

– ¿A qué tónico se puede recurrir para evitar esto? –Preguntó a su  Madre en una oportunidad–. En los periódicos aparecen avisos de  muchas medicinas... ¿has probado alguna?

–Supongo que algo ayudarán –respondió la mujer con vaguedad y  luego de una pausa prosiguió con tono diferente–: Otoko, la mejor  medicina para una mujer es el matrimonio.

Otoko permaneció en silencio.

– ¡El hombre es la medicina que da vida a la mujer! Todas las mujeres  tienen que consumirla.


– ¿Aun cuando se trate de un veneno?

–Aun así. Tú ya probaste el veneno y aún no lo admites, ¿no? Pero yo  sé que puedes encontrar un buen antídoto. A veces se necesita un  veneno para contrarrestar otro veneno. Quizás el remedio sea amargo, pero tienes que cerrar los ojos y tragarlo. Es posible que experimentes  náuseas y creas que no te va a pasar por la garganta.


 Fragmento
 Lo bello y lo triste
Yasunari Kawabata
 Premio Nobel de Literatura 1968





Gracias por echar un vistazo y dejar un comentario
en estos sitios donde puedes ver algunos de mis trabajos.


Google Books
Amazon Books