Cuando espero algo bueno, tomo sendero al mar, me permito bregar hasta
el viejo edificio del faro hasta alcanzar la sal; el yodo sienta bien a
mis legañas, no tanto a las paredes que rezuman historia y
apelmazados fantasmas que parecen habitar los descuidos de sus viejas
bombillas, farolas que alumbraron en días de lluvia, porque de eso se
trata, saltar sobre la arquitectura atlética del viento y de la sal y
permanecer inicuo a los embates del poder que nutre la miseria.
.
Málaga, 07.08.2020
Día Mundial de los Faros
.
.
La Farola de Málaga. Emplazamiento espléndido. Fachada típica de estos
edificios bien conservada. El interior lamentablemente, ruinoso y sucio,
tal que un símil de nuestra sociedad donde imperan las apariencias.