quién sabe lo profundo de una sombra
quién sabe los minutos que dos párpados
pueden permanecer abiertos.
Quién sabe dónde nace un temblor.
Así pasamos noches días enteros
con los dedos hundidos en los ojos
y la respiración amordazada
al filo de un espejo
buscando en su destellos
un camino en medio de la sombra.
No hay pausa ni piedad
el tiempo vuela sobre
la cornisa que andamos.
Los símbolos desnudos (2017)
Gracias por leer y dejar un comentario en mis libros. Amazon y Google Play Libros
Nadie sabe cómo apuntalamos las fuerzas para seguir vivos.
ResponderEliminarUn abrazo